El censo de población inmigrante de Santiago alcanzó este año las 4.536 personas procedentes de países extracomunitarios y comunitarios, lo que supone un aumento de 18,69% con respecto al pasado año. Ya en relación con el 2007 se había registrado un ligero incremento de entorno al 5%. Concretamente en el último año, la capital gallega ganó 712 inmigrantes más. Además del volumen de población inmigrante, la ciudad cuenta con 370 personas en sus censo que corresponde a emigrantes retornados que son habitualmente hijos de gallegos que emigraron a Latinoamérica.

Algunas fuentes municipales indicaron que el incremento, al margen de los datos estadísticos, se percibe especialmente en los servicios sociales de base. Apuntaron que se está registrando la llegada de inmigrantes procedentes de las grandes ciudades. Las razones pueden ser las de buscar localidades más pequeñas, con más posibilidades de empleo y en las que hay un menor control policial de ciudadanos extranjeros sin los papeles en regla.

Para hacer frente a las necesidades del colectivo de inmigrantes, el Concello dispone de una serie de programas específicos para esta población, y de otros que, aunque abiertos a todos los ciudadanos de la capital gallega, también repercuten en un número importante en personas de este grupo de la población.

Dentro de los programas específicos, el departamento de inmigración dispone de planes de acogida y de integración. En el primer grupo están los de aprendizaje de lengua y cultura española y gallega, que se pondrán en marcha a lo largo del próximo mes. Otro es el de ayudas para la manutención y estancia, con el objetivo de atender las necesidades básicas y favorecer la integración.

En esta línea, el departamento confirmó, aunque no está cuantificado, un incremento de solicitudes con respecto al año pasado cuando hubo 14 beneficiados. En el apartado de integración, el Concello reforzará sus líneas de ayudas en dos ejes fundamentales, que son el educativo y el de los servicios sociales básicos. En el primer caso, las ayudas están dirigidas al pago de comedores escolares, actividades extraescolares y material escolar. En este caso, el incremento de prestaciones representa entre un 15% y un 20%.

Al margen de las ayudas económicas directas, el Concello organiza una serie de campañas dirigidas a la población para evitar situaciones de intolerancia. Una de estas campañas se desarrollará este curso en los niveles de tercero y cuarto de la ESO y especialmente en los centros con un mayor porcentaje de población inmigrante. Otra de las campañas irá dirigida a los alumnos de primaria.