“Cumple con todos los requisitos que necesitaría un hogar de acogida”, indica el alcalde y presidente del Fondo Galego de Cooperación e Solidariedade, Juan González, quien incide en que es una residencia frente al mar, totalmente accesible, con 150 plazas y habitaciones individuales de 2 y 3 camas.
“Ojalá no sea necesario utilizarla, pero desde Nigrán tenemos suerte de poder colaborar en esta crisis con este espacio que ya está dotado y que no tiene actividad alguna”, concluye el alcalde y presidente del Fondo Galego de Cooperación e Solidariedade.