El ministro de Trabajo aboga por la cohesión para tratar la inmigración

 

Nuria Fernández / Torres
La cohesión política fue el hilo conductor en la inauguración de las jornadas sobre inmigración: para sacar adelante la modificación de la ley de extranjería, que defendió el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, y para afrontar el fenómeno desde la reflexión, como reclamó el presidente de la Junta, José Antonio Griñán.

 

La nueva ley de extranjería, que se tramita ahora en el Parlamento, el Pacto Europeo sobre Inmigración y, sobre todo, los menores no acompañados fueron los asuntos tratados, ayer, en la inauguración de las Jornadas sobre Inmigración, Educación y Seguridad de los cursos de verano de la Universidad de Jaén en Torres. Cuestiones, todas ellas, que requieren ser tratadas “desde la cohesión y el diálogo”, y no desde “las pasiones”, que es lo que divide a la sociedad, según José Antonio Griñán. Se trata de un “diálogo complejo” en el que, en su opinión, debe entrar Andalucía, una tierra igual de compleja. “Nuestro primer Estatuto hablaba de la emigración, y el último se refiere a la inmigración”, destacó.
En el otro lado, figura la “necesidad” de ordenar los flujos migratorios, uno de los objetivos de la modificación de la polémica ley, que, según el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, cuenta con algunas incongruencias.
“No plantea demasiadas pegas a la reagrupación familiar, sin embargo, niega el permiso laboral al menor que llega y al cónyuge”, citó como ejemplo. Asegura que una política de inmigración tiene que responder a las necesidades del mercado laboral. “Cuando no se ponen en relación, lo primero que retroceden son los derechos”, explicó. Por ello, fomentar las relaciones con los países de origen  es vital en las normativas sobre este ámbito.
Otro asunto sobre el que hizo hincapié fue el de los menores no acompañados. “Cada uno supone un gasto de 80 euros al día” resaltó, aunque, insistió en que no se trata de una cuestión económica. La protección que se sabe se les presta en Europa anima a las mafias a operar con ellos, y eso es, precisamente, lo que se pretende evitar. El ministro aprovechó su paso por Torres para rechazar la propuesta de la patronal para rebajar cinco puntos las cuotas de la Seguridad Socia.
El juez Baltasar Garzón, que se mostró especialmente participativo durante los minutos de debate abiertos a los demás asistentes, destacó la importancia de reflexionar sobre el asunto, más ahora, cuando se tramita la futura ley en la materia y se adelanta la normativa europea, justo cuando empiezan a desatarse brotes xenófobos en países europeos. El rector de la Universidad de Jaén, Manuel Parras Rosa, por su parte, recordó que la inmigración es uno de los asuntos que más interesa a los ciudadanos. “El fenómeno no se ha resuelto aún de manera satisfactoria, pero es posible hacerlo”, destacó, y señaló la educación como el elemento clave para llegar a la interculturalidad.
La alcaldesa de Torres, Elvira San Juan, que se enfrentó a sus primeros cursos en el cargo, se deshizo en agradecimientos hacia los organizadores, muy especialmente, hacia el magistrado de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, por depositar esa confianza en el municipio, que, por unos días, se convierte en el “centro neurálgico de la cultura, la investigación y el turismo”.

“Europa se ha centrado demasiado en el control”
torres n “Es necesaria la impli- cación de los estados e instituciones europeas sobre inmigración”, destacó el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, que se refirió al Pacto Europeo sobre Inmigración y Asilo. Por ello, el ministro propondrá a la Unión Europea que se implique en el problema de los menores no acompañados. Se trata de un asunto que afecta especialmente a Canarias y, en un segundo plano, a Andalucía, y que requiere de un mecanismo para ayudar económicamente a los estados a areagruparlos. “Creo que Europa se ha centrado en el control, pero debería poner el acento en las relaciones con los países de origen”, opinó Corbacho.