El secretario xeral da Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, acaba de aprobar una remodelación de los principales programas que desde hace décadas buscan estrechar los lazos entre la colectividad gallega del exterior y la de la comunidad. Esta modificación busca adaptar la actividad del departamento autonómico a la nueva realidad internacional, instaurada como consecuencia de la pandemia del coronavirus, que está afectando en diferente grado a todos los países con mayor presencia gallega. 

Después de una extensa ronda de consultas a los gallegos y gallegas de los estados y regiones con una población gallega más numerosa, tanto con representantes de la colectividad de cada país como a la propia Comisión Delegada del Consello de Comunidades Galegas y los propios subdirectores y jefes y jefas de los respectivos servicios de la Secretaría Xeral, el responsable de Emigración decidió suspender temporalmente aquellos programas que impliquen desplazamientos internacionales.

La situación generada por la COVID-19 hace desaconsellable y poco prudente mantener programas como Reencontros na Casa, Reencontros na Terra, Conecta con Galicia, Escolas Abertas u Obradoiros, ya que suponen un riesgo sanitario, no solo para las y los beneficiarios, sino para sus familias o, en su caso, monitores, monitoras y cualquier otra persona que entre en contacto con alguna posible persona contagiada. En el caso de los programas de Reencontros, los beneficiarios y beneficiarias pertenecen, además, a uno de los principales grupos de riesgo, el de las personas mayores de 60 años; y en el de Conecta con Galicia gran parte de ellos y ellas son menores de edad, lo que también complica la celebración de estas actividades. A estas dificultades hay que añadirles las restricciones de movilidad y el cierre de las fronteras impuestas por los gobiernos de los diferentes países de origen, y destino, de las y los participantes, que en muchos casos no se levantarán hasta después del verano, mientras que estos programas se celebran en su inmensa mayoría en el mes de julio. Las y los representantes de la colectividad coincidieron, así, en señalar la conveniencia de posponer la continuidad de estas iniciativas del departamento autonómico hasta el próximo año o hasta que la situación sanitaria lo recomiende.

Aumento de ayudas y nuevas medidas

Esta adaptación a la nueva realidad mundial también permitirá redistribuir los fondos que la Secretaría Xeral da Emigración tiene reservados para los gastos de funcionamiento y para la financiación de las actividades de los centros gallegos de todo el mundo, que están sufriendo de una manera especialmente dura los efectos de la pandemia, ya que llevan semanas cerrados sin poder continuar con su rutina. Por eso, la Xunta aprobó recientemente la continuidad de estos programas, lo que permitirá al departamento que dirige Antonio Rodríguez Miranda ampliar en un 50% las ayudas para sufragar parte de los costes de mantenimiento y operatividad de las entidades gallegas en el exterior, así como mejorar las de las actividades que sí se lleven a cabo.

Además, el Gobierno gallego está activando otras medidas que ayuden a la colectividad del exterior a afrontar esta crisis con recursos, como la continuidad de las Ayudas Económicas Individuales de los gallegos y gallegas en situación de necesidad, cuya resolución se agilizará lo máximo posible. O la creación del Aula GaliciaAberta, que pretende paliar las limitaciones que las restricciones de movilidad están imponiendo tanto a las y los particulares como a los centros gallegos de todo el mundo, y que están condicionando gravemente las actividades en materia de formación de las entidades gallegas en el exterior.

La Xunta de Galicia sigue estudiando, asimismo, otras acciones que puedan ayudar a los gallegos y gallegas del exterior a superar esta pandemia sufriendo las menores consecuencias negativas posibles.