LA EMIGRACION EN CIFRAS

Europa cuenta con una población emigrante más joven que América, aunque en ambos casos se rompe el mito de que la diáspora está conformada por personas de la tercera edad. De hecho, el tramo de población más numeroso se encuentra entre los 30 y los 50 años. Sin embargo, las cifras confirman que la colectividad española en América está más envejecida que la europea, donde es mayor el peso de los menores de 20 años. En el nuevo continente los mayores de 75 años doblan en proporción a los de Europa.

La imagen de los emigrantes como personas de la tercera edad es un mito. Así lo demuestran los datos del Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero, PERE, que confirman que un total de 580.336 españoles del exterior -un 39,4 por ciento de los 1.471.691 censadosse encuentran en la franja de edad entre 30 y 50 años.

Sin embargo, un análisis en profundidad revela interesantes diferencias en las pirámides poblacionales de la diáspora por continentes. Así, aunque en ambos casos el número de emigrantes es mayor en la franja entre 30 y 45 años, en Europa destaca el peso de la población joven y en América el de mayores de 75 años.

En el viejo continente, los menores de 20 años son 100.970, lo que supone el 18,01 por ciento del total de inscritos. Mientras en América, los 149.341 menores de 20 años representan el 17,5% del colectivo. Este equilibrio entre ambos continentes se rompe cuando se analizan los mayores de 75 años. En este caso, el continente Europa cuenta con 46.862 inscritos en el PERE, un 8,3 por ciento del total de la diáspora en el continente. En América, el peso de este sector es el doble, un 17,5 por ciento, con 152.449 inscritos.

Diferencia de pensiones

Este mayor peso de los más mayores se debe a que en Europa una parte importante del colectivo aprovecha su jubilación para retornar a España, donde pueden mantenerse con las pensiones que perciben. En el caso de América, la posibilidad de retorno es mucho más reducida.

La mayor cercanía cultural hace que muchos se hayan integrado mejor en sus países de acogida, al que también los atan sus lazos familiares y que, una parte importante no cuenta con jubilaciones que les permitirían mantener un buen nivel de vida en España.

También persisten las mayores dificultades de los consulados para actualizar los datos de los residentes ausentes, ya que algunos tienen que hacer frente a superficies mucho más grandes que España con escasos medios personales y tecnológicos.

ANALISIS

Los de más edad residen en América

Ocho de cada diez emigrantes mayores de 85 años residen en el continente americano. Así lo revelan los datos del PERE, que confirman que la diáspora americana está más envejecida que la europea. De hecho, el 80,5 por ciento de los que superan esta edad residen en el continente, mientras que Europa sólo concentra a un 18,3 por ciento. Este enorme desequilibrio se reduce un poco en el segmento de entre 80 y 85 años, aunque los residentes en América triplican a los de Europa: un 76,6 por ciento frente a un 21,85 por ciento. El retorno y unas listas más depuradas podrían ser las explicaciones. Sin embargo, existe una mayor igualdad en el perfil de la población más joven: los menores de cuatro años. En este caso la balanza se inclina hacia el lado de Europa, donde está el 50,3 por ciento de los más pequeños; mientras que el 44,3 por ciento residen en América.

EL CERA

Las diferencias más acusadas con el Padrón se registran en Madrid y Barcelona

Las diferencias entre el CERA, tradicional termómetro de crecimiento del colectivo español en el exterior, y el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero es de un total de 233.859 personas a mayores en éste último registro. Son un 18,89 por ciento más de inscritos, menores que todavía no han pasado al censo electoral.

La mayoría de estos jóvenes emigrantes están anotados en Madrid y Barcelona, que juntas suponen el 28,7 por ciento de esta diferencia entre CERA y PERE. Ambas son las provincias donde más va a crecer el censo emigrante en cuanto estos jóvenes accedan a la mayoría de edad.

De hecho, el Padrón de Residentes en el Exterior en Madrid supera en un 29,7 por ciento al censo electoral de emigrantes; algo más que en Barcelona, donde alcanza el 24,5 por ciento. También por encima de la media se sitúan provincias como Santa Cruz de Tenerife (20,92 por ciento) o Málaga (20,85 por ciento). Las cuatro gallegas están por debajo de la media, como Pontevedra (15,8%), A Coruña (15,24%) u Ourense (14,88%).

En cifras reales Madrid cuenta con 45.314 inscritos más en el PERE que en el CERA; Barcelona con 21.985; A Coruña, con 17.912; Pontevedra con 15.612 y Santa Cruz de Tenerife con 12.589.