Cinco náufragos rescatados por el Aquarius ya tienen trabajo en Vigo

(21/06/2019)

Cinco náufragos rescatados por el Aquarius ya tienen trabajo en Vigo

Se independizaron después de recibir el apoyo de la ONG Provivienda, que asesora a 110 expatriados

El horizonte se va abriendo para los 600 refugiados abandonados a su suerte el año pasado en el Mediterráneo y que se salvaron tras ser rescatados por el barco Aquarius de Médicos sin Fronteras y Sos Mediterráneo. Cinco de los ocho nigerianos que fueron acogidos en Vigo tras desembarcar en el puerto de Valencia ya han conseguido un trabajo y salido del paraguas de la asociación Provivienda que los ayudó. Ana Pardo, portavoz de este colectivo que promueve el derecho a una vivienda digna, afirma que están colocados en empresas del sector de la agricultura, sin dar más detalles, porque prefieren vivir en el anonimato.

Los otros refugiados continúan centrados en un proceso de formación de cara también a su próxima inserción en el mercado laboral. La pesadilla que vivieron en aguas del Mediterráneo cuando las autoridades italianas les impidieron entrar en este país está teniendo así un final feliz. Habían llegado a Vigo con lo puesto y en esta ciudad recibieron ropa, calzado y una ayuda económica para sus gastos.

Pero, por muy mediático que haya sido su caso, solo es la punta del iceberg de un drama que afecta a más de 25 millones de personas en el mundo.

Ayer se celebró el Día Mundial de los Refugiados y las oenegés Accem y Provivienda organizaron un acto en la estación marítima de Vigo para reivindicar los derechos de quienes tuvieron que escapar de su país por razones económicas, sociales o políticas. Varios refugiados leyeron escritos junto a la estatua de homenaje al emigrante colocada junto al muelle, un lugar simbólico desde donde salieron miles de gallegos el siglo pasado en busca de una mejor vida. Aprovecharon el acto para reivindicar cuestiones como el derecho a recibir una misma atención sanitaria o que se les facilite el acceso al mercado laboral y no se les pongan trabas a la hora de convalidar títulos o permisos.

Trámites

«España tiene el deber histórico de agilizar los trámites burocráticos en relación con nuestra situación jurídica y otorgar la nacionalidad a quienes tuvieron que abandonar su patria buscando un futuro mejor. España no puede olvidar su pasado y es necesario tender una mano a los refugiados», declaró uno de los participantes en un comunicado que leyó a los asistentes.

Dos de los ocho refugiados que se embarcaron en el Aquarius junto con decenas de refugiados de otros países acudieron al acto celebrado en Vigo, pero se mostraron reacios a hablar públicamente.

Provivienda presta apoyo en Vigo a un total de 110 de personas procedentes de países como Guinea, Mauritania, Siria, Colombia o Venezuela. Los asesoran y acompañan en todos los trámites que tienen que realizar ante la Administración y facilitan su formación para que puedan acceder al mercado laboral. Son personas como el matrimonio formado por Vladimir y Susana, de Georgia. Vladimir fue militar y, tras el fin de la guerra, temió ser víctima de represiones por parte del Gobierno prorruso.

Ahamad era peluquero en Siria y huyó de la guerra con su mujer y sus cuatro hijos. Está aprendiendo a hablar español y le gustaría volver a trabajar en su oficio.

El venezolano Jonny Gandica llegó con su mujer y su hijo escapando del clima de inseguridad que se vive en su país. Actualmente está realizando un curso de soldador, gracias al cual espera conseguir un trabajo. «Necesitamos estabilizarnos para ayudar a nuestras familias allá», dice.

Todos han venido para emprender una nueva vida y olvidar los momentos trágicos que atravesaron en sus países de origen. «Es muy duro para mí hablar de mi pasado. Cuando lo recuerdo, me siento muy mal», afirma el guineano Lamarán.