La Comisión Europea (CE) defendió hoy la necesidad de desplegar una política de inmigración con visión de futuro y garantizar una financiación adecuada para su cumplimiento, con el objetivo de atajar el número creciente de ataques xenófobos en Europa y fomentar el crecimiento económico.
"Nuestra estrategia sobre inmigración debe reflejar nuestras prioridades comunes y necesidades futuras. Las políticas orientadas al futuro y el liderazgo político son necesarias para convertir la inmigración en una fuerza dinámica para el crecimiento y el progreso", dijo la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström.
"Muchas de estas personas están altamente cualificadas y debemos darles la oportunidad de desarrollar todo su potencial en sus nuevos países", agregó la comisaria en un comunicado.
A la luz de las conclusiones del cuarto informe anual sobre inmigración y asilo que elabora el Ejecutivo comunitario, la institución busca la implicación del Parlamento Europeo y del Consejo de la Unión Europea (UE) para impulsar medidas legislativas actualmente sobre la mesa.
Entre otros, la CE recomienda mejorar la gestión de los flujos de viajeros en las fronteras exteriores de los Veintisiete, reforzar las políticas de inmigración e integración, así como acelerar la lucha contra la inmigración irregular y la trata de personas.
Además, pide garantizar la financiación adecuada para desarrollar estas políticas en el presupuesto plurianual correspondiente al periodo 2014-2020, al tiempo que aconseja a los Estados miembros que hagan por el momento un uso eficiente de los recursos disponibles.
Según los datos del Eurostat, la oficina de estadística comunitaria, la UE negó la entrada a 316.060 inmigrantes el pasado año, un 8 % menos que en 2011, aunque las peticiones de asilo aumentaron un 9,7 %, hasta las 330.000.
Esto es resultado de un número creciente de demandantes sirios, a los que se suman las peticiones de países como Afganistán, Rusia, Pakistán y Serbia, según se desprende del informe de la Comisión.
El Ejecutivo comunitario quiere, entre otros, acelerar la adopción de directivas sobre los trabajadores estacionales y del personal destinado a otro país dentro de una misma empresa, al tiempo que busca clarificar las normas para estudiantes o investigadores de terceros países en los Veintisiete.
Asimismo, prevé mejorar la cooperación a través de la creación de la Oficina Europea de Apoyo al Asilo y reforzar la solidaridad con Grecia, que acoge gran parte de los refugiados sirios.
Finalmente, la CE trata de crear el Sistema de Vigilancia de Fronteras Europeas (EUROSUR), para facilitar la detección de embarcaciones pequeñas con inmigrantes ilegales, mientras que pretende reforzar los procedimientos de verificación de viajeros extranjeros en las fronteras.
