La ONG Accem, que proporciona atención y acogida a las personas refugiadas e inmigrantes, informa de estos datos en un comunicado, en el que reclama que "la crisis económica no debe hacernos olvidar la gravedad de las circunstancias que obligan a una persona a convertirse en refugiada".

"Más de 43 millones de personas en el mundo se han visto obligadas a abandonar su lugar de origen o residencia habitual al sufrir violencia, amenazas y persecución a causa de su nacionalidad, religión, raza, opinión política o pertenencia a un grupo social determinado", añade.

La organización recuerda en su nota que el 20 de junio se conmemora el Día Mundial del Refugiado y señala que, pese a la grave situación de crisis socio-económica que vive el país, la sociedad española debe seguir caracterizándose por su capacidad para dar acogida y refugio.

La guerra, la persecución o la represión están detrás de los flujos de refugiados que proceden de países como Afganistán, Irak, Somalia, República Democrática del Congo, Myanmar, Colombia o Sudán, que necesitan de la acogida española, concluye.