Los colectivos Rumiñahui, Aculco, Vomade y Ari-Perú acusan al Ayuntamiento de Vic de cometer una «irresponsable manipulación» de la ley de Extranjería y de la ley Reguladora de Régimen Local «con fines meramente electoralistas y que rayan en prácticas racistas y xenófobas». Asimismo, recuerdan que si se ejecuta tal prohibición tendría consecuencias directas en aspectos básicos como la salud o la educación, porque sin empadronamiento no se puede acceder ni a la tarjeta sanitaria ni a la escolarización.
La queja de las asociaciones llega el mismo día en que nuevas voces del Gobierno central piden al alcalde de Vic, Josep María Vila, que rectifique. Tanto Manuel Chaves como Alfredo Pérez Rubalcaba insistieron ayer en que el acuerdo municipal, que aún no se ha hecho efectivo, «es manifiestamente ilegal».